Hoy 12 de Octubre de 2013, conmemoramos una fecha conocida como "El encuentro de dos mundos"
El viernes 12 de octubre de 1492 llegó a América un grupo expedicionario
español representando a los Reyes Católicos de Castilla y Aragón,
comandados por el almirante Cristóbal Colón, y que habían partido en el mes de agosto del Puerto de Palos de La Frontera (Cádiz).
La primera tierra que pisaron sus pies fue la isla Guanahani, en lo que hoy es San Salvador (Bahamas).
Los viajes de los portugueses a la India siguiendo la costa Africana significaron un estímulo para quienes creían en la ruta hacia el oeste como el camino más corto para llegar hasta las regiones del Asia oriental partiendo desde Europa. Cristobal Colón fue partidario de esta hipótesis. Apoyado por la monarquía española, organizó un viaje de exploración que lo condujo a la costa Americana en 1492. Colón creyó que había llegado al continente asiático, denominado por los europeos Indias y murió sin saber que había llegado a un continente desconocido por Europa.
Cristóbal Colón, en representación de los Reyes Católicos de Castilla y Aragón, Isabel y Fernando, realizó cuatro viajes desde Europa a América, en 1492, 1493, 1498 y 1502.
En el primero de ellos llegó hasta Guanahani, cuya exacta localización es discutida.
En el tercer viaje arribó a territorio continental en la actual Venezuela.
A partir del tercer viaje de Colón, descubrimientos y conquista progresaron conjuntamente. Durante los veinte años que separan 1499 de 1519, cuando empieza la empresa de Magallanes, tuvieron lugar los "viajes menores o andaluces", concertados por la corona con otros navegantes, quebrando el discutido monopolio de Colón.
En el primero de éstos participó Américo Vespucio, a quien se ha atribuído ser el primer europeo en proponer que las tierras a las que Colón había llegado no eran en realidad parte de Asia, sino de un continente desconocido por los europeos.
Los Reyes Católicos, particularmente Isabel, deciden ayudar a Colón en su proyecto de llegar a Asia por Occidente. El 17 de Abril de 1492, Cristóbal Colón firma con los reyes las llamadas Capitulaciones de Santa Fe, documentos por los cuales se autoriza y financia la expedición de Colón a las Indias por el mar hacia occidente.
Una vez en la villa de Palos de la Frontera, una Real Providencia de los reyes ordenaba a los vecinos poner a disposición del Almirante dos carabelas totalmente armadas y aparejadas. Pero la marinería de la zona no estaba dispuesta a formar parte de la expedición con un desconocido, como lo era Colón para aquellos hombres, a no ser que lo acompañara algún navegante respetado en la villa.
En estas circunstancias y gracias a la ayuda de los franciscanos del Monasterio de la Rábida y a Pero Vázquez de la Frontera, viejo y respetado marino de la zona, Colón conoce a Martín Alonso Pinzón, rico armador y líder natural del lugar gracias a sus muchas navegaciones tanto por el Atlántico como por el Mediterráneo. Colón le dirigió estas palabras:
"Señor Martín Alonso Pinçón, vamos a este viage que, si salimos con él y Dios nos descubre tierras, yo os prometo por la Corona Real de partir con vos como un hermano."
Martín Alonso comienza una enérgica campaña en favor de la empresa.
Desecha las naves que Colón había confiscado en Moguer y contrata otras nuevas, La Pinta y La Niña, que sabía que "eran muy aptas para navegar", pues las tenía arrendadas, aporta parte de su fortuna personal y contacta con sus hermanos Francisco y Vicente a los que convence para que se unan a la aventura. Así mismo, contrata y enrola a toda la marinería necesaria para la empresa.
Ultimados los preparativos, la expedición parte del puerto de Palos de la Frontera el 3 de Agosto de 1492. La escuadra colombina estaba formada por las carabelas Pinta, Niña, y por la nao Santa María.
La expedición se dirigió hacia Las Canarias, donde se hicieron reparaciones en la Pinta, en el timón y en las velas. Finalizadas las reparaciones, desde la isla de Gomera continuaron su travesía por el Atlántico el 6 de Septiembre.
El viaje no resultó fácil para nadie, hubieron varios conatos de amotinamiento, pero gracias a la presencia y las dotes de mando de Alonso Pinzón, se consiguieron resolver. Cuando ya se habían agotado todos los cálculos y previsiones realizados por Colón, se oyó desde la Pinta el grito de Rodrigo de Triana, ¡¡Tierra a la vista!!, dos horas después de la medianoche del 12 de Octubre.
"...descubrir no es sólo llegar, es tomar posesión, grabar nombres, dejar constancia de que se ha llegado (...) de tal manera que las tierras a las que se ha llegado se incorporen al general conocimiento de la cultura, de la civilización que envía esa expedición. Eso es descubrir."
Julio Izquierdo, Historiador
La primera tierra que pisaron sus pies fue la isla Guanahani, en lo que hoy es San Salvador (Bahamas).
Los viajes de los portugueses a la India siguiendo la costa Africana significaron un estímulo para quienes creían en la ruta hacia el oeste como el camino más corto para llegar hasta las regiones del Asia oriental partiendo desde Europa. Cristobal Colón fue partidario de esta hipótesis. Apoyado por la monarquía española, organizó un viaje de exploración que lo condujo a la costa Americana en 1492. Colón creyó que había llegado al continente asiático, denominado por los europeos Indias y murió sin saber que había llegado a un continente desconocido por Europa.
Cristóbal Colón, en representación de los Reyes Católicos de Castilla y Aragón, Isabel y Fernando, realizó cuatro viajes desde Europa a América, en 1492, 1493, 1498 y 1502.
En el primero de ellos llegó hasta Guanahani, cuya exacta localización es discutida.
En el tercer viaje arribó a territorio continental en la actual Venezuela.
A partir del tercer viaje de Colón, descubrimientos y conquista progresaron conjuntamente. Durante los veinte años que separan 1499 de 1519, cuando empieza la empresa de Magallanes, tuvieron lugar los "viajes menores o andaluces", concertados por la corona con otros navegantes, quebrando el discutido monopolio de Colón.
En el primero de éstos participó Américo Vespucio, a quien se ha atribuído ser el primer europeo en proponer que las tierras a las que Colón había llegado no eran en realidad parte de Asia, sino de un continente desconocido por los europeos.
Los Reyes Católicos, particularmente Isabel, deciden ayudar a Colón en su proyecto de llegar a Asia por Occidente. El 17 de Abril de 1492, Cristóbal Colón firma con los reyes las llamadas Capitulaciones de Santa Fe, documentos por los cuales se autoriza y financia la expedición de Colón a las Indias por el mar hacia occidente.
Una vez en la villa de Palos de la Frontera, una Real Providencia de los reyes ordenaba a los vecinos poner a disposición del Almirante dos carabelas totalmente armadas y aparejadas. Pero la marinería de la zona no estaba dispuesta a formar parte de la expedición con un desconocido, como lo era Colón para aquellos hombres, a no ser que lo acompañara algún navegante respetado en la villa.
En estas circunstancias y gracias a la ayuda de los franciscanos del Monasterio de la Rábida y a Pero Vázquez de la Frontera, viejo y respetado marino de la zona, Colón conoce a Martín Alonso Pinzón, rico armador y líder natural del lugar gracias a sus muchas navegaciones tanto por el Atlántico como por el Mediterráneo. Colón le dirigió estas palabras:
"Señor Martín Alonso Pinçón, vamos a este viage que, si salimos con él y Dios nos descubre tierras, yo os prometo por la Corona Real de partir con vos como un hermano."
Martín Alonso comienza una enérgica campaña en favor de la empresa.
Desecha las naves que Colón había confiscado en Moguer y contrata otras nuevas, La Pinta y La Niña, que sabía que "eran muy aptas para navegar", pues las tenía arrendadas, aporta parte de su fortuna personal y contacta con sus hermanos Francisco y Vicente a los que convence para que se unan a la aventura. Así mismo, contrata y enrola a toda la marinería necesaria para la empresa.
Ultimados los preparativos, la expedición parte del puerto de Palos de la Frontera el 3 de Agosto de 1492. La escuadra colombina estaba formada por las carabelas Pinta, Niña, y por la nao Santa María.
La expedición se dirigió hacia Las Canarias, donde se hicieron reparaciones en la Pinta, en el timón y en las velas. Finalizadas las reparaciones, desde la isla de Gomera continuaron su travesía por el Atlántico el 6 de Septiembre.
El viaje no resultó fácil para nadie, hubieron varios conatos de amotinamiento, pero gracias a la presencia y las dotes de mando de Alonso Pinzón, se consiguieron resolver. Cuando ya se habían agotado todos los cálculos y previsiones realizados por Colón, se oyó desde la Pinta el grito de Rodrigo de Triana, ¡¡Tierra a la vista!!, dos horas después de la medianoche del 12 de Octubre.
"...descubrir no es sólo llegar, es tomar posesión, grabar nombres, dejar constancia de que se ha llegado (...) de tal manera que las tierras a las que se ha llegado se incorporen al general conocimiento de la cultura, de la civilización que envía esa expedición. Eso es descubrir."
Julio Izquierdo, Historiador